jueves, 20 de noviembre de 2008

Para Pablo.





La Via Ferrea tiene poesía,
es poesía y está en sus restos,
en lo nuevo, en los recuerdos,
tiene sentimientos y vida,
Amor...

Fue el sufrimiento y la alegría de muchos
y muchas familias,
fue el esfuerzo de la gente,
esa que trabajó abriendo senderos,
que traspasó montañas,
que creó pueblos y en ellos se quedó.

Ahora es olvido,
poesía, nostalgia, magia.

Hoy dedicaré esta entrada a uno de los grandes de Chile
Pablo Neruda.
que escribió estos versos inspirado en los paisajes que veía desde el tren
"Aromos rubios en los campos de Loncoche."
Un poema de la historia.
Un poema de la vida, de lo que se ve en el Sur.
De Pablo para su deleite.

"Aromos rubios en los campos de Loncoche.

La pata gris del Malo pisó estas pardas tierras,
hirió estos dulces surcos, movió estos curvos montes,
rasguñó las llanuras guardadas por la hilera
rural de las derechas alamedas bifrontes.

El terraplén yacente removió su cansancio,
se abrió como una mano desesperada el cerro,
en cabalgatas ebrias galopaban las nubes
arrancando de Dios, de la tierra y del cielo.

El agua entró en la tierra mientras la tierra huía
abiertas las entrañas y anegada la frente:
hacia los cuatro vientos, en las tardes malditas,
rodaban —ululando como tigres— los trenes.

Yo soy una palabra de este paisaje muerto,
yo soy el corazón de este cielo vacío:
cuando voy por los campos, con el alma en el viento,
mis venas continúan el rumor de los ríos.

A dónde vas ahora? —Sobre el cielo la greda
del crepúsculo, para los dedos de la noche.
No alumbrarán estrellas... A mis ojos se enredan
aromos rubios en los campos de Loncoche."

Pablo Neruda, 1923.

Estos son los aromos que inspiraron al poeta.







Aromos rubios en la "Rinco" de Loncoche


Aquí un video de Pablo en una locomotora y parte de la "Oda a los trenes del Sur".


video bajado de youtube

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Atentamente
Manuel jara.